ESTRELLA: Adam Hanga (1989, 199 cms). El alero se encuentra en el mejor momento de su carrera. Con una capacidad física sobresaliente, ha añadido una solvencia en el lanzamiento exterior que sumada a sus habilidades defensivas (con piernas para defender a cualquier exterior) y a su juego a campo abierto le hacen uno de los jugadores más importantes de Europa. El juego de Hungría gira a su alrededor y su concurso será de vital importancia para el ansiado cuarto puesto de grupo que buscan los magiares.

Adam Hanga (1989)
PROMESA: Rosco Allen (1993, 206 cms). Este ala pivot fichado recientemente por Iberostar Tenerife proviniente de Obradoiro será una de las piezas interiores fundamentales de la selección húngara. Aportará intensidad, juego de cara a canasta y mucha contundencia en las finalizaciones.

Rosco Allen (1993)
ATENCIÓN A: David Vojvoda (1990, 196 cms). El mejor anotador de la selección húngara será uno de los focos de atención de su selección. Su amenaza desde el perímetro será una de las mejores armas del combinado húngaro. Como a Hanga, le gusta jugar a campo abierto y sumar puntos a base de triples y de jugar P&R.